El cáncer de próstata avanzado a menudo hace metástasis en los huesos. La tasa de supervivencia del cáncer de próstata metastásico cuando el cáncer se disemina al hueso es muy baja. Sin embargo, el pronóstico sigue siendo ligeramente mejor en comparación con las metástasis hepáticas.
Cuando a alguien se le diagnostica cáncer de próstata demasiado tarde, existe un 60 por ciento de posibilidades de que el cáncer se propague a los huesos. Cuando el cáncer ha hecho metástasis al hueso, el tratamiento se vuelve más complejo. Como resultado, la tasa de supervivencia metastásica para las metástasis óseas puede ser inferior al 40 %. La mayoría de los pacientes con metástasis óseas solo pueden sobrevivir alrededor de 19 a 21 meses después del diagnóstico.
Dado que el cáncer de próstata es un cáncer de crecimiento lento, muchos pacientes realmente no notan los síntomas. De hecho, más del 50% de los pacientes son diagnosticados con cáncer de próstata cuando se ha extendido a los huesos. En este caso, para mejorar la tasa de supervivencia del cáncer de próstata metastásico y también para garantizar un tratamiento eficaz, el médico de cabecera debe poder reconocer si el cáncer se origina en los huesos o es una metástasis de cáncer de otros lugares.
Los síntomas de involucran dolor al orinar, sangre en la orina y también interrupción del flujo de orina. Sin embargo, si el cáncer se ha propagado a los huesos, los pacientes experimentarán síntomas adicionales que no están relacionados con los síntomas iniciales. En el caso del cáncer de próstata con metástasis óseas, los síntomas incluyen dolor en el área afectada, huesos más débiles, fracturas repentinas y también parálisis. Las costillas, la columna vertebral y las caderas suelen ser los lugares afectados por el cáncer. Sin embargo, no es imposible que el cáncer también aparezca en los otros huesos.
Diagnostico y tratamiento
Las metástasis óseas pueden ser bastante difíciles de diagnosticar porque los síntomas son similares a los de la artritis. Sin embargo, cuando un paciente con cáncer de próstata siente algunos síntomas en el área del hueso, lo mejor es revisarlo de inmediato porque existe una alta probabilidad de que el dolor sea un signo de metástasis ósea.
La gammagrafía ósea es uno de los métodos más efectivos para diagnosticar metástasis óseas. Este método utiliza un trazador radiactivo que se inyecta por vía intravenosa en la vena del paciente. Si los síntomas son causados por cáncer, el área aparecerá oscura en la cámara.
Cuando el cáncer se ha propagado a los huesos, se debe ajustar el plan de tratamiento. La terapia hormonal podría no ser la mejor opción porque se sabe que debilita los huesos. Además de la radioterapia, los bisfosfonatos se utilizan a menudo como tratamiento adicional para fortalecer los huesos.